Muchas veces para infortunio, es necesario que ocurra una tragedia; para darnos cuenta de lo frágiles que somos.
El pasado Martes un terremoto de 7.3 en la escala de Ritcher cuyo epicentro fué a 18 kms de la Cápital Puerto Príncipe, sacudió a Haití. En el siniestro el 90% de la infraestrutura de la capital se vino al suelo llevándose consigo vidas humanas y dejándo a los sobrevivientes en una de las quizá más grandes situaciones precarias de la historia de ese pobre país del Atlántico.
La ayuda ha venido por todos lados, pero la pista y el aeropuerto de la ciudad se encontraban destrozados; situación que ya se ha ido solucionando. Las escenas de dolor han recorrido nuestras pantallas y aún las tenemos grabadas en la memoria, pero ¿Qué podemos hacer para ayudar?
Aquellos que deseen realizar una obra por sus semejantes pueden acercarse a la Cruz Roja para llevar, Kits de aseo, Alimentos no perecederos o Ropa dentro de los principales elementos que se necesitan.
Las personas que deseen acercarse el miercoles a las 7 en el parque banderas y llevar alguna colaboración; con los compañeros del Grupo HUMANIMAL VILLAVICENCIO, recibiremos allí lo que deseen aportar de los elementos arriba nombrados y luego de reunirlos, nos acercaremos a la Cruz Roja Para hacer la entrega. Así mismo para las personas que no viven en Villavicencio en las Oficinas de cada una de sus ciudades esta entidad recibirá sus aportes a esta causa Humanitaria.
De igual forma como el pequeño, Redjeson Hausteen, fue rescatado por socorristas Españoles, luego de tener tres días bajo los escombros, hay otras personas que también lo perdieron todo y merecen una segunda oportunidad. Nosotros podemos darles una mano y alivianar un poco su sufrimiento y su dolor con solo poner nuestra mano en el corazón y hacer lo correcto.
Pensemos que es cierto esa frase de :"Hoy por tí, mañana por mí" además nosotros estamos en un "paraiso" comparado con lo que han tenido que vivir estas personas, no solo al perder sus pertenencias, sino también a sus seres amados.
Así que los esperamos, o si desean hacerlo de forma pesonal no lo olviden en la Cruz Roja pueden hacer sus donaciones.
Me resta solo agradecerles, y que Dios los cuíde hoy y siempre.